Día histórico

Hoy hemos sido testigos de un día histórico: por primera vez desde 2003 el oficialismo mordió el polvo de la derrota en el Congreso. Por primera vez los números le fueron esquivos. Por primera vez, hasta cierta prepotencia sobradora fue esgrimida CONTRA el oficialismo, que , pateticamente observaba cómo el poder se le iba de las manos.
Obviamente lo más vergonzozo lo protagonizó Kirchner: cuando el acuerdo - obligado por la debilidad- había sido suscripto por oficialismo, el "ex" rompió la baraja como chico enojado y casi hace naufragar la sesión. Pareciera que quiere ver sangre, aunque la espada lo atraviese a él. Es un suicida peligroso, incapaz de entender la lógica parlamentaria del acuerdo, la negociación, de mantener la palabra, de ser duro pero leal a lo acordado. Es una especie de soldado mono-programado para la batalla, incapaz de adaptarse al lugar de las pacíficas negociaciones.
Por suerte, la cordura llegó y, a pesar de Nestor, el acuerdo se firmó.
Néstor Kirchner es un antiheroe patético, al cual, por suerte, hoy le comenzó el olvido.