Hoy se abre una nueva década. Como sabemos nunca hubo un nombre satisfactorio y aceptado por todos para la década que terminó ayer: la década del dosmil, la primera década del siglo 21, los dosmil, etc.
En esta las cosas parecen ser más claras: la década del diez.
Es es, por lo tanto, mi primer post de la década del diez.
Creo, pura intuición y deseo, que esta década será la última para las feroces y escasas dictaduras que aun perviven en América, Africa, Europa y Asia.
Será la década de la definitiva instauración de la democracia, el libre comercio, las ideas de libertad económica, de expresión, de acceso a Internet, libertad de conciencia.
Puro deseo, quizás. Pero sin deseos explicitos, poco podemos hacer para cambiar el mundo. Como dijo Popper, la historia no tiene ningún sentido predeterminado, pero tendrá el sentido que nosotros querramos otorgarle: nosotros hacemos la historia.
Manos a la obra.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario